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Cabrera revela lo que quiere ser tras sucumbir en la carrera por la nominación a la Alcaldía en SDE

Por Robert Vargas
Tras sucumbir en sus intentos por ser el candidato a la Alcaldía de Santo Domingo Este, el diputado Ramón Cabrera se propone promover «la unidad» del Partido de la Liberación Dominicana, tras actuar prácticamente a lo largo de este Siglo XXI, como líder de una fracción dura que, sin embargo, ha perdido a muchos de sus dirigentes de mayor envergadura.

Hace poco, Cabrera decidió retirarse de la carrera por la nominación mediante un mensaje en las redes sociales a sus seguidores, sin admitir en ningún caso que, como pre candidato, sus posibilidades de obtener la victoria eran exiguas y casi «no marcaba» en las encuestas de preferencias electorales.

Así las cosas, el diputado, que una vez fue el más popular de la Circunscripción 2 lo que generó a su favor un movimiento de simpatía que Ciudad Oriental definió como una «Cabreramanía», quiere ser ente de moderación cuando su incidencia y simpatía en su territorio se desploma en forma acelerada.

Ayer, Cabrera volvió a usar las redes sociales para difundir un mensaje de texto en formato .pdf con su firma, (el anterior carecía de firma), para comunicarle a sus seguidores su decisión de abstenerse de respaldar a cualquiera de los candidatos a síndico con lo que envía el mensaje de que pretende mantenerse «neutral».

Sin embargo, en el mismo documento dispone quienes de su corriente son los que harán cargo de tomar las decisiones importantes con relación al tema de las primarias peledeístas abiertas del PLD el seis de octubre para escoger a los candidatos a puestos de elección popular.

En cuanto a los dirigentes que nos acompañaron en nuestra aspiración, quedarán bajo la coordinación del compañero Wilson Beras, miembro del Comité Central y precandidato a Regidor por la Circunscripción #1, el compañero Rafael Castillo, precandidato a Diputado por la Circunscripción #2 y Víctor Estévez por la Circunscripción #3. Con respecto a los precandidatos a Alcalde existentes, ellos tomarán la decisión que más le convenga al Partido en cada demarcación«, dice Cabrera.

En otra parte de su documento, el diputado establece que «ahora, la pregunta de muchos es, ¿A cuál de los precandidatos apoyará Cabrera? Y la respuesta es: a ninguno, porque trabajaré por la unidad del Partido de la Liberación Dominicana».

Justifica su decisión en que  si él es «parte del proceso; después de las primarias no podré tener la autoridad que se requiere para salir a rescatar e integrar a dirigentes lesionados y otros desinteresados para participar en las elecciones de febrero de 2020″.

Tiene la creencia, además, de que » aportaré más después de las primarias, trabajando por la unidad junto al candidato electo, para que el Partido de la Liberación Dominicana pueda enfrentar con éxito al PRM».

Finalmente le desea «muchos éxitos a los precandidatos a la Alcaldía y espero al ganador para que trabajemos unidos por el triunfo del Partido de la Liberación Dominicana».

La condición de activo por la «unidad» del PLD la asume el diputado tras percatarse a tiempo de que su propuesta municipal no había entusiasmado a un importante porcentaje de electores y de que se exponía a padecer una derrota humillante en las urnas el seis de octubre.

Ahora, con su liderazgo drásticamente disminuido, quiere ser lo que nunca asumió durante sus años de gloria, en los que llegó a tachar al boschismo de no ser más que «poesía» en el momento actual y de negarse, en la práctica, a asumir los postulados ideológicos y políticos del fundador del PLD, Juan Bosch, lo que en su momento provocó duras críticas en su contra por Domingo Jiménez.

Las posibilidades de Cabrera de retornar a la cima de la popularidad podría estar relacionada en el futuro a que él pudiera ocupar puestos de dirección en alguna institución del Estado en la que pueda designar a empleados, lo que no se descarta.

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