«Lo importante no es donde comienzas, sino donde terminas»
Por Robert Vargas
Aquella noche, cuando ya era irreversible la victoria del candidato a la alcaldía de SDE por el PRM, Manuel Jiménez, visité al aspirante al mismo puesto por el PLD, Luis Alberto Tejeda.
Fue apenas el año pasado, específicamente en marzo del 2020.
Tejeda acababa de morder el polvo de la derrota y, como es natural, a su alrededor no había algarabía. Después de todo, el que gana es quien goza. Y los perremeístas estaban gozando. Saboreaban el «néctar de la victoria».
Creí que encontraría a un Luis Alberto Tejeda desencajado, sin ánimos, alicaído.
Pero no resultó así. Ví a un candidato sereno, tranquilo. Eso sí, buscando en su cabeza los motivos de su derrota.
Me recordó a Domingo Batista cuando, en el año 2016, trataba de encontrar respuesta a lo que había sucedido cuando fue vencido por Alfredo Martínez.
Luis Alberto no es un tipo cualquiera de esos que pierden el control ante las dificultades. Al contrario, se mantiene sereno y, en medio de las incertidumbres, analiza todas las variables antes de dar el siguiente paso.
-«Hola, hermano Robert», me dijo.
-«Hola Luis», le respondí.
Me invitó a sentarme. Llegué junto con Cinthia Polanco, Era la culminación de una jornada agotadora.
Ya Luis Alberto y todo su equipo sabían que habían perdido las elecciones ante Manuel Jiménez, un artista que convenció a muchos de que haría una ciudad «justa y creativa».
Tejeda no es un artista, sino un gerente y, como tal, reacciona ante las circunstancias y se prepara para el siguiente paso.
Anteriormente les he comentado que esa noche vi llegar al lugar a los hijos mayores de Luis Alberto, profesionales de alto nivel y graduados en universidades.
Uno de los muchachos me preguntó:
-«Don Robert, ¿Qué fue lo que pasó?».
Él no entendía lo que había ocurrido. Estaba convencido que su papá ganaría la alcaldía.
Aún así, el chico no se mostró desmoralizado ni destruido, sino que siguió hacia una habitación contigua a entregarse de lleno a disfrutar de unos video-juegos.
Después, llegaron otros jóvenes profesionales a los cuales había visto participar activamente en la campaña y también se fueron a jugar.
-«Robert, ¿Qué quiere tomar? ¿Un vaso de vino? ¿Jugo? ¿Café?».
-«Agua a temperatura ambiente, por favor», le dije.
-«¿Y Usted, Cinthia?.
-«Café», respondió ella, quien no «baraja» una taza de café.
Hablamos de distintos temas y, claro está, de la derrota electoral que acababa de padecer.
Sin embargo, mi gran sorpresa brotó cuando Luis Alberto me dijo que:
-«Ahora voy a aprovechar para dedicarle más tiempo a mis empresas» y, feliz, me mostró en su teléfono celular «mi nueva empresa que está en plena producción y a la que no he tenido tiempo de ir a visitar».
O sea, que Luis Alberto es un gerente capaz de tocar el piano con los diez dedos. Mientras estaba en campaña electoral, todos sus gerentes continuaban al frente de sus múltiples empresas y materializando planes.
Luego, el triunfante Manuel Jiménez asumió el cargo y sembró de esperanzas el municipio.
Sin embargo, Jiménez es un buen cantante y mejor compositor. De hecho, él me regaló un día toda su producción discográfica y la tengo pautada en nuestra emisora Ritmoriental.com.
Manuel Jiménez canta bien y compone mejor, pero en el trayecto de su gestión ha demostrado ser un pésimo gerente, tanto así que se quedó sin dinero para pagar el salario de tres meses de los empleados del ASDE y suspendió la aplicación del Presupuesto Participativo.
Ante el desastre gerencial de Jiménez, son muchas las personas que han conversado con Luis Alberto para reclamarle que lance una ofensiva contra el alcalde.
Pero Luis Alberto ha preferido dejar libre al síndico para que desarrolle su plan y hasta le ha hecho propuestas públicas para ayudarle en su gestión en beneficio de la Ciudad.
Sin embargo, quienes se le aproximan consideran que «este es el momento de Luis Aberto», convencidos de que el municipio necesita tener como líder a un gerente probado, no ha un artista sin capacidad gerencial.
En ese contexto, Luis Alberto se ha reunido con empresarios, dirigentes políticos y vecinos de distintas comunidades.
Todavía él no le ha dicho a nadie si volverá a aspirar a ser alcalde de SDE, pero ahora parece que a él lo están «aspirando».
Quizás eso ayude a entender las visitas que está realizando a vecinos de distintas comunidades con cuales se reúne y conversa.
Después de todo, Luis Alberto Tejeda es del criterio de que «Lo importante no es donde comienzas, sino donde terminas». Y, de eso, él sabe bastante.