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El momento incomodo que vivió Ramón Cabrera en la inauguración del Metro+ Vídeo

Por Robert Vargas
El fin justifica los medios.– El diputado peledeísta Ramón Cabrera vivió un momento incómodo durante la inauguración de la línea 2B del Metro de Santo Domingo, el pasado jueves ocho de agosto, según muestra un vídeo captado por Ciudad Oriental.

Ocurre que Cabrera, por algún motivo no se sentó en el área que estaba asignada a los invitados especiales, entre estos diputados, regidores, miembros del Comité Político del PLD, el Director General de la Policía, el Canciller de la República Miguel Vargas, y otros funcionarios.

El legislador prefirió evitar ese amasijo de personas a las que hablaron directamente un obispo, una dirigente comunitaria, el alcalde de Santo Domingo Este, el Director de la Opret y el mismísimo presidente de la República Danilo Medina.

 

El diputado prefirió seguir su propio «librito» y llegó por detrás.

Se colocó al fondo, lejos de la vista de todos, y detrás de la tarima en la que estaba sentado el presidente, sus colaboradores y guardaespaldas.

El problema consistió en que donde él se colocó no era un área destinada al público, ni siquiera para los invitados.

El acto apenas iniciaba cuando se le vió allí detrás, algo impaciente, visiblemente desorientado, mientras se movía de un lado a otro y, de repente, hasta dando la espalda a la tarima y al público que no podía verlo.

Ese no es el Cabrera que proyecta la imagen de tipo seguro de sí mismo. Pero él sabía perfectamente lo que hacía.

En algún momento sintió la necesidad de sentarse y vió pasar a su lado a un funcionario del Palacio Nacional quien, al parecer, es el responsable de buscar las sillas a los invitados.

Cuando Cabrera lo vio, se dirigió a él directamente, pero este no le prestó la mínima atención y continuó su camino como si nadie le hubiera hablado.

En ese momento, Cabrera, visiblemente humillado, dio la vuelta sobre sus propios pasos y, a seguidas, tomó por un brazo a otro funcionario a quien le dijo algo.

Se trató de un momento incómodo, según muestra el vídeo.

A pesar de todo, ese instante para él resultó importante porque fue la mejor forma que tuvo de estar en la  trayectoria por donde pasaría el presidente Medina, a quien eventualmente podría pedirle que posara con él para hacerse una foto.

Y, además, le permitió estar lejos de la claque que hizo quillar al presidente Danilo Medina.

Quizás su intención era estar en la el trayecto que seguiría el presidente para aproximarsele y pedir que le permitiera hacerse una foto con él para proyectar la percepción de ser el presunto favorecido del Palacio Nacional.

Aquí podría aplicarse la máxima de que «el fin justifica los medios».

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