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Tras fracasar en la gestión de la Covid-19, Abinader opta por copiar lo que hacía el gobierno de Danilo Medina

Por Robert Vargas
Tras fracasar de forma estrepitosa en la gestión de la pandemia del nuevo coronavirus, el gobierno de Luis Abinader ha optado por copiar abiertamente lo que hacía la administración de Danilo Medina para enfrentar la pandemia.

Cuando eran oposición, la mayoría de los actuales funcionarios se destacaron por sus críticas a la gestión de Medina, a quien le imputaban presuntas intenciones de instaurar en el país una dictadura.

Lo hicieron cuando Medina se vio en la necesidad de solicitar al Congreso Nacional la autorización para declarar el estado de emergencia y, de ahí, disponer por decreto el toque de queda como medida extrema para limitar la circulación de personas y prevenir el aumento de la pandemia.

Las críticas fueron tan feroces que el Congreso Nacional le regateó una y otra vez la duración de los períodos de emergencia a tal punto, que Medina se vio obligado a desistir de volver a solicitarlos y,  en una ocasión, hasta eliminó el toque de queda.

Sin embargo, Abinader, que en la oposición parecía que tenía una solución para todo, ha dado muestras reiteradas de que su gestión de la pandemia conduce el país al desastre sanitario, tras promover la apertura del mercado, el turismo, los gimnasios, las iglesias, los espectáculos y las playas, entre otros.

Durante varios meses, el Gobierno vendió la percepción de que la pandemia estaba bajo control, pero nunca dejó de solicitar al Congreso Nacional que le autorizara para decidir el estado de emergencia.

Aún así, avanzó de forma progresiva en la desescalada, llevó al mínimo el distanciamiento social e impuso un toque de queda cada vez más reducido.

Ahora, tras verse obligado a admitir que la crisis sanitaria ha empeorado, con contagiados por miles y el aumento incesante de las muertes por Covid-19; el gobierno ha tenido que regresar a la modalidad de clases a distancia o virtuales, a pesar de que antes cerró los oídos ante los llamados de quienes le criticaban por llamar los chicos a las clases en medio del aumento de la pandemia.

Por igual, los mismos que criticaban los «tapones de día y toques de queda de noche», han tenido que acoger el método de Medina, al disponer que el toque de queda inicie a las 6:00 PM e cada día para concluir a las 5:00 AM del día siguiente.

Esto implica que, mientras dure la disposición adoptada ayer mediante el decreto 349-21, el toque de queda será de 11 horas consecutivas diariamente.

Esta es solo una muestra de que el Gobierno se aferra a los métodos danilistas de combate a la pandemia para tratar de frenar el avance del nuevo coronavirus y las muertes por la Covid-19.

Son los mismos métodos que antes definían como «dictatoriales».

Hay una «pequeña diferencia»: Abinader ha eliminado la mayoría de programas de subsidios sociales y ya ni se ven las filas de gentes  en los bancos buscando el «dinerito» que le colocaban.

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