
EE.UU. fuerza la renuncia de Henry y un gobierno de transición en el caos de Haití
Por William Perdomo
El diario estadounidense Miami Herald reveló que la administración de Joe Biden propuso al primer ministro haitiano Ariel Henry que aceptara un gobierno de transición y renunciara a su cargo durante un vuelo de regreso a Haití.
Esta propuesta marcó un giro drástico en la política de Estados Unidos hacia el mandatario haitiano, luego de meses de respaldo a su liderazgo para encabezar el proceso de transición hacia elecciones democráticas.
Según informó la periodista Jacqueline Charles, la solicitud de renuncia a Henry se produjo después de un día de reuniones urgentes en Washington, donde se analizó la crítica situación política y de seguridad que atraviesa Haití.
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El pedido de la Casa Blanca representó «un cambio de rumbo que pocos en Haití esperaban», considerando que durante mucho tiempo se había resistido a las llamadas para la salida de Henry, solo para ahora presionar por su renuncia precipitada en un momento de grave peligro en el país caribeño.
La propuesta estadounidense se produjo en pleno vuelo, cuando la comitiva de Henry se encontraba de regreso a Haití después de las conversaciones en Washington.
Sin embargo, el primer ministro no pudo aterrizar en el aeropuerto Toussaint Louverture de Puerto Príncipe debido al asedio de las bandas criminales que controlan gran parte de la capital.
Ante esta situación, Henry intentó ingresar a territorio dominicano, pero las autoridades de República Dominicana le negaron el ingreso por la ola de violencia que azota a la vecina nación haitiana.
Fuentes periodísticas revelaron que, al no poder aterrizar ni en Haití ni en República Dominicana, Henry permaneció resguardado durante la noche del martes en Puerto Rico bajo custodia del Servicio Secreto, el Departamento de Seguridad Nacional (Homeland Security) y la Patrulla Fronteriza (Border Patrol) de Estados Unidos.
El avión en el que viajaba es un jet ejecutivo Gulfstream IV con capacidad para unas 10 personas, operado por la empresa estadounidense NextJets, con el código de vuelo KPO12900.
Esta inesperada presión de Washington sobre Henry se produce en un contexto de profunda crisis política, económica y humanitaria en Haití, agravada por el accionar de poderosas pandillas que mantienen un virtual control territorial en vastas zonas de Puerto Príncipe y otras regiones del país.
La solicitud de renuncia y la instalación de un gobierno de transición apuntan a desbloquear el estancamiento institucional y sentar las bases para la celebración de comicios presidenciales y legislativos en un futuro próximo.
Por otro lado, el Consejo de Seguridad de la ONU ha programado para hoy miércoles una sesión extraordinaria y a puerta cerrada en New York para tratar el caso de Haití, en la que intervendrá de forma remota la representante especial para Haití, María Isabel Salvador.
Durante el fin de semana turbas armadas tomaron Puerto Príncipe, capital de Haití, buscando tomar el control de las principales instituciones e impedir el retorno a la sede del gobierno del primer ministro Ariel Henry.