
¿Morirá Rafael Lara en prisión?
¿Morirá Rafael Lara en prisión?
Por Robert Vargas
Hace apenas unos días, el veterano regidor reformista Tácito Perdomo urgía a las autoridades a cuidar la seguridad del suplente del asesinado concejal Catalino Sánchez, Rafael Lara, quien está en prisión.
Perdomo cree necesario evitar que a Lara «le pase algo», por que está interesado en que el crimen sea aclarado.
Así se lo dijo a Ciudad Oriental cuando consideró necesario que las investigaciones sean hechas en todas las direcciones.
Les comento esto porque hoy fuentes cercanas a la familia de Lara le han comentado a Ciudad Oriental que este está «muy enfermo», tiene un progresivo estado de deterioro y ha perdido mucho peso.
Peor aún, nos explicaron que el Ministerio Público se negaba a llevar a Lara a la cárcel de La Victoria, donde ordenó un tribunal que fuera confinado a la espera de juicio por el caso Catalino Sánchez.

Nos sorprendimos al enterarnos de que todavía el domingo pasado Lara estaba encerrado en la cárcel de San Luis, una semana después del fallo en su contra.
Según los informantes, Lara enfermó en la cárcel de San Luis y las autoridades le negaron cualquier posibilidad de ser atendidos por un médico. Ni siquiera admitieron que lo vieron los médicos del 911.
Ahora sabemos que el imputado ha sido trasladado a la cárcel de Najayo y que aún allí su salud empeora.
En esas circunstancias entendemos mejor los temores y reclamos del regidor Tácito Perdomo.
Recuerdo que hace varios años un hombre, que estaba en perfecto estado de salud, fue condenado a 30 años de prisión por asesinato y narcotráfico.
Con frecuencia yo lo entrevisté.
Un día me llamó desde la prisión porque quería darme unas declaraciones.
Su abogado me dijo que aquel hombre estaba muy enfermo y que, físicamente, parecía otra persona.
Al amanecer de un día cualquiera, alguien me llamó para decirme que al hombre lo habían llevado de urgencia al hospital Dr. Mosco Puello, donde murió poco después.
El cadáver estaba totalmente negro, como un carbón.
Los parientes aseguran que fue asesinado, envenenado poco a poco, hasta lograr que muriera «por muerte natural».
Les hablo de «El Duro Motor».
Ahora, con Lara me ha llegado a la mente ese caso, puesto que hasta hace unos días éste estaba sano y robusto, pero ahora, según las fuentes, presenta un estado progresivo de deterioro de su salud.
No lo he visto, pero me esforzaré en ir a la prisión a visitarle para ver qué tan ciertas son esas denuncias.
De todas maneras, aquí no se puede descartar nada porque con su muerte algunas cosas podrían quedar bajo la alfombra.
El viejo Tácito sabe muy bien porqué me hizo el comentario que les mencioné al principio.
¿Sucederá con Lara lo mismo que pasó al Duro Motors?
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