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*Riqueza y Pobreza Cada Una Por Su Lado*

Por Quilvio Vásquez

La población no se siente parte de la reforma fiscal y tributaria que el gobierno se dispone a discutir. Un ambiente de apatía se deja sentir y se nota en la conciencia ciudadana.

La seguridad de que los políticos solo apoyarán los cambios que aumenten sus beneficios llena de impotencia a aquellos que se atreven a proponer mejoras para la vida social y económica de la nación.

La Asociación de Ateos Dominicanos propone la implementación de una reforma tributaria que reducirá la carga tributaria de todos los sectores. Se trata de una modificación que elimina los impuestos selectivos y crea el sistema de impuesto único.

Entre los grandes beneficios de este impuesto está la implementación de servicios gratuitos para todos los ciudadanos. Todos los servicios de salud, educación, documentación oficial, recolección de basura y electricidad pasarán a ser responsabilidad del Estado. Estamos seguros de que todos estos servicios serán menos costosos para el Estado, especialmente el servicio de electricidad, al eliminar la corrupción y las cargas burocráticas de las empresas eléctricas.

Esta propuesta será presentada por la Asociación de Ateos Dominicanos (ATEODOM) a todas las oficinas administrativas del gobierno y a las cámaras legislativas, para que sea discutida y enriquecida con los aportes de todos los sectores y clases sociales del país. La propuesta también será entregada a todos los partidos políticos con el fin de ser enriquecida por la consulta de sus miembros.

Es una propuesta que elimina la corrupción, las cargas innecesarias del Estado y los trámites burocráticos. Aprobar el sistema de impuesto único permitirá una relación de igualdad entre los ricos y los pobres de nuestro país. Con el impuesto único podremos entender que la riqueza y la pobreza pueden convivir.

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El pueblo entenderá que el rico es aquel que sirve más, el que se sacrifica para tener un medio de producción por el bien de todos. Rico es una persona que hace feliz a muchas personas, porque fabrica para satisfacer las necesidades de los demás. Aclarando este punto, un fabricante que produce un millón de un producto y lo vende ganando un peso por cada uno, se ganaría un millón de pesos. La gente paga con satisfacción por ese producto porque es necesario.

Así, el sistema capitalista nos da la oportunidad de dedicarnos a servir. Cuanto más sirvas, más ganarás. El impuesto único elimina los impuestos selectivos y permite a cada uno servir de alguna manera. Dependiendo del servicio al que te dediques, de tu esfuerzo, inteligencia y preparación, dependerá tu escala de riqueza.

El impuesto único posiblemente será menor que el impuesto que pagas ahora porque todos los servicios costarán menos.

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