
Nuevo gobierno de Trump: Expectativas impredecibles
Por Juan López
Las características personales del presidente Donald Trump, sus experiencias del primer gobierno (2017-2021), su contundente triunfo electoral (incluyendo control del Congreso por republicanos) y por el conjunto de anuncios y amenazas que ha manifestado; entre la población norteamericana y el resto del mundo, ha surgido un conjunto de expectativas impredecibles con respecto a las posibles ejecutorias que implementará y, obviamente, sobre sus consecuencias económicas, sociales y políticas.
Durante la transición (noviembre 2024-enero 2025), el presidente Trump dio a conocer el equipo de hombres y mujeres que le acompañará, que firmará 100 órdenes ejecutivas (decretos) el mismo día de la juramentación (20 de enero) y varias acciones destinadas a otros países que empezará a ejecutar para cumplir con su slogan de campaña: “Hacer grande a Estados Unidos otra vez”.
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En esta ocasión, el presidente Trump encuentra este escenario: a) Los intereses de la geopolítica predominando en un mundo multipolar. b) Crecimiento y fortalecimiento de la organización del BRIC. c) Participación directa de los EE.UU. en dos complicadas guerras (Rusia-OTAN-Ucrania) e israelitas Vs. palestinos. d) Los diferentes conflictos en países de Medio Oriente.
También, e) China creciendo como potencia económica y con gran presencia comercial en el continente americano. f) Las críticas situaciones que afectan en Latinoamérica a varios países, por ejemplos: Cuba, Nicaragua, Venezuela, Haití, Ecuador, Bolivia. g) Las complicadas crisis generadas por las drogas (especialmente el fentanilo) y por las masivas inmigraciones en EE.UU. Y, h) Sobre las relaciones diplomáticas, políticas y comerciales con la R. Dominicana.
Por dicho escenario, el conjunto de promesas y amenazas del presidente Trump así como las expectativas impredecibles que su accionar provoca, exhortamos a reflexionar sobre las siguientes interrogantes:
1.- Las diferentes amenazas directas contra Panamá, México, Canadá, Groenlandia, China, Europa, OMS y OTAN ¿serán parte de su método de negociaciones, bravuconadas o será capaz de ejecutarlas?
2.- Ante la reiteración de que, desde el primer día, empezarán las deportaciones masivas de los más de 11 millones de inmigrantes ilegales que viven y trabajan en EE.UU. ¿encontrará condiciones legales, técnicas y económicas para cumplirlas?
3.- ¿Podrá el presidente Trump conseguir los anhelados y necesarios acuerdos de paz entre Rusia-OTAN-Ucrania, israelitas—palestinos y resolver los conflictos de Medio Oriente?
4.- Con las acciones que se propone implementar ¿podrá detener y reducir el narcotráfico, el creciente consumo de drogas y del fentanilo entre los norteamericanos?
5.- Para enfrentar las crisis de Cuba, Venezuela, Nicaragua y Haití, ¿usará las negociaciones políticas o recurrirá a las intervenciones militares?
6.- Luego de analizar, desde el poder, las inminentes consecuencias para la economía norteamericana, ¿será capaz de aumentar los aranceles contra China, México, Canadá y Europa?
7.- Las relaciones comerciales, diplomáticas y políticas EE.UU–RD ¿Serán mejoradas y ampliadas?
“Una cosa es llamar al diablo y otra es verlo llegar”. Al reflexionar sobre esa antigua expresión popular, consideramos que el presidente Trump, no obstante su estilo y controversiales expresiones, tendrá éxitos en varias de sus propuestas, otras serán resultados mixtos de racionales negociaciones y algunas, simplemente por improcedentes, serán archivadas, con lo cual contribuirá con la pacificación mundial y aportará para “Hacer grande a Estados Unidos otra vez”. Por lo tanto, debemos estar atentos, monitoreando las expectativas impredecibles que se han creado en torno al nuevo gobierno del presidente Trump.