
A 180 grados: el PLD en el extremo opuesto de sus principios originarios
Por Manuel Jiménez
Es increíble, pero la cúpula del PLD se ha colocado exactamente en el extremo opuesto de sus principios originarios. Hoy por hoy, es el más antidemocrático de todos los partidos. Ahora quieren apelar a una supuesta regla de oro, que más bien debería denominarse “la regla de la corrupción municipal”, o por lo menos, “la regla del oro”, (del, con L).
Esa “regla”, decía que el sindico ganador “designa” el presidente del concejo de regidores. Se concertó, disque, para evitar sangre y, sin embargo, ahora es que hay sangre (regidores asesinados y alcaldes presos). Es, que esa regla solo puede cumplir un rol, incentivar la corrupción.
Dígame usted, si el órgano regulador lo regula el alcalde, ¿Quién regula al alcalde?
La meta del PLD es 0 (cero) democracia y si el pueblo y si las organizaciones democráticas se descuidan, lo van a lograr.
Estas actuaciones de la cúpula del PLD, si uno no estuviera palpándolas y viéndolas “con sus propios ojos”, no las creería. El propio Presidente Danilo Medina, fue Presidente de la Cámara de Diputados, siendo el PLD oposición, también lo fue Norge Botello; hoy actúan de forma totalmente opuesta.
En verdad, que están haciéndole honor al mote de “come solos”.
Leonel fue presidente con la oposición dirigiendo el congreso y todo se consensuaba sin traumas; verlo hoy (a Leonel) defendiendo ese absurdo nos avergüenza de él.
Propuesta para cambiar la «regla de oro»
La situación es difícil, no encuentran que hacer, en la mayoría de las alcaldías no lograron la mayoría de regidores. Esto, constituye una excelente oportunidad para desarrollar gobiernos municipales democráticos, participativos y, sobre todo, transparentes.
Han sido tantas las trampas, que alguna tiene que fallarle. Pero, si la oposición no ejerce su papel con determinación, a lo mejor desaproveche esta oportunidad, que sí podría ser de oro.
El momento es propicio para que las organizaciones que trabajan en defensa de la democracia se pronuncien, se movilicen y presionen a ver si se crean, en los gobiernos locales, espacio para la democracia.
En ese sentido, propongo públicamente, invertir la “regla de oro” para que diga: El Presidente del Consejo de Regidores será siempre un regidor o regidora perteneciente al partido que obtuvo el segundo lugar y la vicepresidencia del concejo la ocupará un regidor o regidora del partido que obtuvo el tercer lugar, aplicable en todos los municipios y distritos municipales del país.
¡Viva la justicia, la equidad, la participación, la transparencia, la democracia!
¡Sin lucha no hay victoria!