Destacadas de CiudadOriental.comPolítica

Bernarda Aracena: acosada, solitaria y sometida a juicio disciplinario en el PRM

Por Robert Vargas
A la regidora y dirigente del PRM Bernarda Aracena se le ha borrado por completo la sonrisa, sobre todo desde que ha sido sometida al acoso por munícipes y colegas que no le perdonan que votara a favor de la construcción  de una parada de guaguas al lado del Parque Nacional de Los Tres Ojos.

Para ella es peor aún la decisión del Partido Revolucionario Moderno de someterla a un juicio disciplinario por violar al menos un importante acápite de los estatutos de la organización.

Bernarda no está sola. Le acompaña la también regidora perremeísta Milagros Segura.

Las dos fueron tachadas de «traidoras» el pasado jueves por una mulititud de personas que asistió a la Sala Capitular a presenciar una sesión crucial, que concluyó en medio del caos acabando de raíz con la propuesta de realizar un plebiscito municipal que decidiera la suerte de la parada de guaguas en cuestión.

También decidieron 19 de los 32 regidores presentes otorgar el uso de suelo para dar paso a la obra.

Desde que se produjo la votación, la furia de los munícipes se abatió sobre ella y otros más, que debieron escapar a toda prisa y algunos presentaron pelea, puños en alto.

El espectáculo fue deprimente.

Aracena, que momentos antes se mostraba altiva y segura, se vió obligada a admitir ser increpada en público de manera ácida por su colega Claudia Pérez, del PRSD, que la recriminó por la postura que adoptó al colocarse del lado de los «depredadores».

A Bernarda Aracena y a Milagros Segura no les importó para nada las orientaciones que le dieron en privado los más altos dirigentes del PRM minutos antes en el local del Bloque perremeísta.

Ellas hicieron lo que les vino en ganas y que, aparentemente, habían acordado con sus aliados del Partido de la Liberación Dominicana.

Bernarda es del criterio de que «amor con amor se paga».

Después de todo, el puesto de regidora ella se lo debe al alcalde Afredo Martínez y al presidente del Concejo, Luis Flores, que se la jugaron por ella.

Ahora, Bernarda y Milagros parede que temen al grito de «traidora» de parte de las personas que confiaron en ellas.

El vídeo que acompaña esta nota les muestra lo sucedido en la Sala Capitular tan pronto se produjo la polémica votación. Ni los peledeístas la defendieron.

Compartir:
Botón volver arriba