Por Robert Vargas Esta noche he conversado con un importante dirigente del Partido Revolucionario Moderno, (PRM), y al final, de algo quedé convencido los perremeístas se tratan entre ellos como fieras rabiosas, capaces de convertir un rifirrafe intrascendente en una brutal pelea en la que todos pueden morir «destrozados».:
Primero, ¿Qué es un rifirrafe?
El diccionario de la Real Academia de la Lengua Española define este concepto como una «contienda o bulla ligera y sin trascendencia».
Pero, en el caso de SDE, los perremeístas no están inmersos en una «contienda o bulla sin trascendencia», sino que han trasformado sus respectivos rifirrafes en verdaderos pleitos callejeros en los que, entre ellos, se tratan como si fueran enemigos a muerte.
No existe peor enemigo de un perremeísta que otro perremeísta. Recuérdese que la mayoría son ex perredeístas y así ha sido la conducta de los perredeístas: se matan entre ellos por cualquier cosa.
No soportan ver que alguno de ellos logre ocupar un puesto de trascendencia en el estado o dentro de su propio partido.
Esa conducta es tan pronunciada y firme entre los militantes del PRM, que están a la espera de cualquier mínimo detalle para intentar destruir a los suyos sin importarles las consecuencias.
Conozco el caso de algunos funcionarios que han sido víctimas de fake news perfectamente elaboradas para destrozarlos y, , quienes más credibilidad dan a esas noticias falsas no son los de la oposición, sino, los mismos perremeístas, sobre todo, si no han sido designados en algún puesto con buenos sueldos.
Por ese motivo, entre otros, en la actualidad los perremeístas están cavando su propia tumba en Santo Domingo Este, un municipio en el que se proyecta que en el año 2024 tendrá alrededor de un millón de votantes.
Y, que conste, quienes parece estar más dispuestos a lograr la autodestrucción del PRM son aquellos que no sienten ni padecen por esa organización y no les importaría largarse a otra parcela en cualquier a momento.
Se marcharían justo en el instante en el que puedan hacer más daño a su propia organización.
Quizás por este motivo es que el presidente ad vitan del PRM en SDE, considera posible que esta organización permanezca en el gobierno local solo cuatro años y ni un día más.
Para lograrlo, algunos perremeístas hacen cuanto pueden para destruir a sus propios líderes.