
Multarían con hasta 500 mil pesos y dos años de cárcel a operadores tragamonedas
Ministerio Público dispuesto a eliminar esas máquinas de los colmados en SDE
Para que no aleguen ignorancia: los colmaderos que operan máquinas tragamonedas en sus negocios han comenzado a ser advertidos de que podrían ser multados con hasta 500 mil pesos y condenados a prisión correccional por hasta seis meses por violar la ley que regula el uso de esos instrumentos de juego.
La advertencia ha sido hecha por dos vías distintas a los operadores de máquinas tragamonedas en Santo Domingo Este por la Procuradora Fiscal titular de la provincia Santo Domingo, Olga Diná Llaverías, y por la responsable de la Unidad de Atención a Casos de Contaminación Sónica, Maquinas y Tragamonedas y afines, magistrada Raquel Cruz.
Hace un par de días, el Ministerio Público recordó que la ley 29-06 sobre autorización de expedición de licencia para juegos de azar, establece que este tipo de maquina puede estar instalada en bancas deportivas o en casinos donde solo ingresen adultos y no tengan acceso los niños, ni siquiera de manera visual.
La pasada semana, la Cruz le dijo directamente, y mirando a la cara a varios colmaderos, que la próxima vez que instalen tragamonedas en sus negocios, regresará a buscarlos con una orden de arresto dictada por un juez.
Diná Llaverías ha instruido a Cruz para que acentúe los operativos contra la instalación de esas máquinas de juegos en lugares que estén al alcance de niños, niñas y adolescentes, de conformidad con la ley 29-06.
El propósito es evitar que más personas vulnerables caigan en la adicción a los juegos (ludopatía infantil).
Las autoridades están convencidas de que la ludopatía puede llevar a los niños a convertirse en potenciales delincuentes.
El Ministerio de Haciendas, que también debe velar por la aplicación de esa ley, ha permitido que en la mayoría de los colmados de Santo Domingo Este fueran instaladas las máquinas tragamonedas.
Sin embargo, en este municipio el Ministerio Público está enviando señales claras de su disposición a enfrentar esa situación hasta hacerla desaparecer por completo de los colmados y espacios similares.
Durante los últimos días, varios colmaderos han retirado las máquinas de lugares visibles en los establecimientos atendiendo a instrucciones de los propietarios delas máquinas.
Por lo pronto, ya están advertidos, Diná Llaverías y Cruz están dispuestas a hacer cumplir la ley y, quienes se resistan, deberán pagar de su bolsillo las multas que les impongan y prepararse a pasar al m enos seis meses en prisión correccional.
Olga Dina Llaverías, ha sido enfática al explicar que la colocación de éstas máquinas, en lugares donde los niños tienen acceso, genera ludopatía infantil, por lo que la institución en su labor de perseguir el delito y como parte de sus acciones preventivas realiza los operativos para evitar que los jóvenes caigan en las garras del vicio del juego de azar.