El Segundo Tribunal Colegiado de la provincia Santo Domingo, distribuyó 78 años de prisión a cuatro hombres encontrados culpables en el tráfico de 484.94 kilogramos de cocaína, ocupados en el puerto multimodal Caucedo, en el municipio de Boca Chica.
Los condenados son los imputados José Alberto de Jesús, Julio Francisco Hernández Sosa y Hansel Santana Báez, de 28, 29 y 37 años de edad, a los cuales les fueron impuestas penas de 20 años de prisión a cada uno.
En tanto, el encartado Ronald Joel Villanueva de los Santos, de 29 años, fue condenado a 18 años de prisión.
Los cuatro justiciables tienen sus domicilios en Los Botados, Andrés y La Caleta, en Boca Chica.
El grupo fue encontrado culpable de conformar una asociación ilícita para el tráfico nacional e internacional de sustancias controladas, agravado por el porte ilegal de armas de fuego.
De acuerdo al expediente, fueron arrestados en flagrante delito aproximadamente a la 3:50 am del 24 de agosto del 2019, cuando se encontraban en el bloque C, del puerto multimodal Caucedo, en Boca Chica, cuando contaminaban un contenedor que tenía consignado cajas de cartón conteniendo botas y zapatos.
Un oficial asignado a la seguridad militar, notó que al lado del contenedor estaban unos bultos extraños e inmediatamente los ahora condenados intentaron escapar a bordo de un camión cabezote, conducido por el imputado José Alberto de Jesús.
Inmediatamente, se instaló un dispositivo de seguridad con el objetivo de no permitir la salida del vehículo, siendo avistado en la salida P-1, donde agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y de seguridad aeroportuaria procedieron a indicarle que se detuviera.
Al no obtemperar las instrucciones de pare, intentó atropellar a los agentes, perdiendo el control de vehículo y quedo varado encima del contén.
Al ser requisado el camión, entraron un compartimiento secreto tipo caleta, detrás de los asientos derechos e izquierdos, donde estaban escondidos los coimputados Julio Francisco Hernández Sosa y Hansel Santana Báez.
El Ministerio Público le atribuye a los imputados ser parte de una red que se dedicaba a la distribución de drogas en el país y el envío de estas al extranjero, utilizando de forma clandestina los contenedores que se encuentran en el Puerto Multimodal Caucedo.
En la caleta se ocupó un revolver marca Smith and Wesson, plateado, serie número 65365, un teléfono marca IPhone, un celular Samsung J7, dos cizallas color amarillas, un puñal, un precinto o sello de seguridad, color rojo y un pasamontaña, color negro.
Al ser inspeccionado el lugar donde fueron vistos los imputados dejar los bultos que estaban al lado del contenedor, se trataba de tres bultos de color rojo, azul y negro, conteniendo en su interior cada uno 26 paquetes de un material de origen desconocido, que se presumía cocaína.
Los 78 paquetes, envueltos en plásticos con los colores negro, azul, verde, amarillo y blanco, así como también con cintas adhesiva transparente marcada con los logotipos de Chanel, AP,Kenso Paris, R-8, CC Chanel y algunos, sin marcas.
Luego de ser analizados por el Laboratorio Químico de Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), se determinó ser cocaína clorhidratada con un peso global de 81.10 kilógramos, según el Certificado de Análisis Químico Forense no. SCI-2019-08-32-018595 de fecha 24 de agosto del 2019.
Mientras, al realizar la inspección del contenedor, comprobaron que los imputados habían cortado el precinto o sello de seguridad, desasiéndose de ellos, usando las dos cizallas color amarilla que fueron ocupadas al requisar el camión.
En el interior del contenedor los oficiales ocuparon 15 bultos de diferentes marcas, colores azul, rojo y negro, conteniendo en su interior la cantidad de 393 paquetes de un material de origen desconocido, presumiblemente cocaína o heroína, envueltos en plásticos con los colores negro, azul, verde, amarillo y blanco, así como también con cintas adhesiva transparente marcada con los logotipos de Chanel, AP,Kenso Paris, R-8, CC Chanel y algunos, sin marcas.
Luego de ser analizados por el Laboratorio Químico de Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), se determinó que los 393 paquetes incautados se determinó ser cocaína clorhidratada con un peso global de 403.84 kilógramos, según el Certificado de Análisis Químico Forense no. SCI-2019-08-32-018594 de fecha 24 de agosto del 2019.
Todos los paquetes ocupados sumaron en total 471, con un peso global de 484.94 kilogramos de cocaína clorhidratada, según los referidos Certificados de Análisis del INACIF.
A los cuatros justiciables fueron procesados y presentados ante un juez de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de Santo Domingo Este, que Luego de acoger la petición del Ministerio Público, le impuso un año de prisión preventiva y la declaratoria de complejidad del caso.
La medida de coerción a los cuatro imputados, fue para ser cumplida en la Penitenciaría Nacional de La Victoria.
En el juicio de fondo, el tribunal compuesto por Josefina Ubiera Guerrero (presidente), Ariella Cedano Núñez y Yuris Cuevas de la Cruz (miembros), encontró a los encartados culpable en la violación de los Artículos 5 literal A, 28, 60, 75 Párrafo II, 85 letras B, C, D, de la Ley No. 50-88 sobre Drogas y Sustancias Controladas, que tipifican y sancionan los delitos de asociación ilícita para el tráfico de drogas nacional e internacional.
Los tres condenados a 20 años de prisión, les fue impuesto el pago de dos millones de pesos a cada uno, mientras el condenado a 18 de cárcel, deberá pagar un millón de pesos, a favor del Estado.
La fiscal Marlene Roa, del Departamento de Litigación Definitiva de la Fiscalía de Santo Domingo Este, estuvo a su cargo demostrar al plenario la culpabilidad de los justiciables.
En tanto, el fiscal Ignacio Rojas Sánchez, fiscal adscripto a la Dirección Nacional de Drogas, estuvo a su cargo la investigación y formulación de acusación a los encartados.
Ambos fiscales, con las evidencias materiales, documentales, testimoniales y periciales en contra de los encartados lograron establecen sus vínculos con esa actividad del crimen organizado, logrando la imposición de las condenas.